Las tiendas en Milán de los diseñadores Dolce
& Gabbana ubicadas en las calles Venezia y Della Spiga, así como el
restaurante Gold y un quiosco de prensa, no han abierto sus puestas desde el
viernes de la semana pasada. En sus escaparates cuelga un cartel en el que se
lee " cerrado por indignación".
Domenico Dolce y Stefano Gabbana habían
anunciado que cerrarían sus tiendas y suspenderían todas sus actividades en
Milán en protesta contra una medida anunciada por el Ayuntamiento de la ciudad
en su contra. Afirmaron que el hecho no impide que sigan pagando a sus 250
empleados en Milán durante el cierre temporal de sus nueve tiendas.
La polémica con la institución edilicia
milanesa comenzó hace unos días cuando el concejal de comercio, Franco D`
Alfonso, refiriéndose a una posible participación del dúo de diseñadores en la
Semana de la Moda de Milán que se celebra en el mes de septiembre próximo dijo
que " no había espacios públicos para quienes estuvieran condenados por
evasión fiscal". Se recuerda que en Julio pasado un tribunal de Milán condenó a
Dolce & Gabbana a un año y ocho meses de prisión por un delito de evasión
fiscal de alrededor mil millones de euros. (fuente El País)
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